PODEMOS y también Ezker Anitza-IU han comenzado a subir en votos, y para las próximas elecciones municipales, que
con toda seguridad pueden y van a dar
otra gran sorpresa, porque las masas populares de votantes ya ha dado el primero y costoso paso cualitativo
de votar con criterio propio, es decir han roto los hilos de marioneta que el
Estado ha manejado durante treinta cinco
años para obligarles a los votos
sectarios del “ahora al PP” y “luego al
PSOE”, dos partidos diferentes en siglas pero idénticos en propósitos de
engañar y exprimir al pueblo. Dos partidos que además son los pilares del Régimen
Juan carlista.
Tras el Crac del 25M, todo ha
empezado a cambiar en el Estado español y el revuelo no ha hecho más que
comenzar, pues tras la noche electoral
las convulsiónese producida por los resultados de las urnas, como los temblores
de un terremoto, están provocando una
seria de movimientos difíciles de prever, tanto en el PSOE como en el PP, pues los
dos partidos han sido afectados por una impresionante perdida millonaria de votos.
Y los primeros indicios son la perdida de lo que parecía una placida y equilibrada
estabilidad organizativa e ideología en el seno de su respectivos partidos, que a su vez dominaban entre los dos
la competición electoral alcanzando, alternándose, el gobierno del Estado lo
que también daba cierta estabilidad institucional a los gobiernos surgidos,
pues todo “quedaba en casa “y bajo el control del Estado. Cosa que con la irrupción de terceros partidos,
aquella estabilidad tiene ya tiene visos de quebrarse.
Porque el bipartidismo, una derecha mayoritaria contra una “izquierda” también mayoritaria, entre la concurrencia de partidos surgidas
tras la llamada “transición”, no nos creamos que fue una casualidad surgida de
la concurrencia democrática entre partidos
donde se configuraron las mayorías “por la espontaneidad electoral” nada
de eso , todo ha sido una creación de Estado neo franquista para garantizar su
continuidad. Y el bipartidismo controlado es un arma estratégica, de vital
importancia para el continuismo estatal,
y la ruptura de este esquema es muy
preocupante para él.
En aquel diseño del transvase del
Estado franquista a la Monarquía neo franquista,
no hubo nada de “espontaneidad” El escenario político, presuntamente
democrático, que se monto fue exhaustivamente planificado entre los franquistas,
aun en las riendas del poder junto a los
servicios secretos de la UE y de la CIA. Cuyo resultado fue que los franquistas
quedarían con las riendas de los poderes
estratégicos del “nuevo” Estado; el ejército, el poder judicial y el poder mediático,
y toda la burocracia institucional en las manos de los franquistas que desde
entonces empezarían a llamarse “demócratas”
y al montaje le llamarían “modélica
transición” Y que a su vez formarían un partido político
que aglutinaría a todas las diferentes ramas del franquismo agrupadas entonces
en el llamado Movimiento Nacional, que se fueron transformando en lo que hoy es
el PP.
Y en
aquel montaje “democrático” el partido oficialmente de derechas, necesitaría un
partido oficial de “izquierdas”, pero de su creación, para no llevarse sorpresas,
para competir “democráticamente” con la derecha, tal y como mandan los cánones
de la democracia occidental. Y el truco de la “transición” fue que el partido de
“izquierdas” fue una creación de laboratorio, un falso partido de una izquierda
“cartón piedra, formado por unos selectos oportunistas, liderados por Felipe Gonzales, reclutados
con el fin de conformar un partido “político socialista” de pacotilla para aparentar un falso enfrentamiento
electoral con el PP. Y crear la ilusión en el electorado de que las clases
populares y trabajadoras estarían representadas ante la ambiciosa derecha conservadora , para así , crear una
ficticia concurrencia electoral y una
falsa y adulterada estabilidad democrática,
que saltara cuando el esquema falle.
Todo un ingenioso montaje para camuflar la realidad de que los Poderes
franquistas (con sus enormes privilegios políticos y económicos, y sobre todo impunidad
absoluta para que sus crímenes de lesa humanidad cometidos durante el
franquismo, quedasen inmunes) siguiesen de facto en las riendas del Estado.
Aquel partido surgido no tenía
nada que ver con el partido original PSOE de Pablo Iglesias, que se puede decir
que existía de forma testimonial en el exilio, prácticamente ya había dejado de existir. Sus siglas fueron arrampladas con
marrullerías por los nuevos y falsos
“socialistas” que irrumpirían en el Estado arropados y financiados súbitamente
por la llamada socialdemocracia, alemana ( derecha ) europea por los años 70, en tareas de captación y organización,
incluso con la colaboración logística de la policía secreta franquista.( 1)
De ahí que la población del Estado ha comenzado ver (le ha costado) que
el “izquierdismo socialista” del PSOE solo ha sido una sarta de mentiras descomunales,
y que el partido no es más que una copia del PP a la hora de comportarse en
tareas de Gobierno. Siempre ha sido tan corrupto y tan opresor con sus medidas de recortes y maltrato contra las
clases populares y tan ruin y
nefasto como su homologo el PP con sus prácticas de terrorismo de Estado.
Aquel montaje de la “transición” fue
para que las castas dominantes de franquismo, con la complicidad de occidente,
continuasen con sus privilegios económicos y prerrogativas políticas intactas,
a la vez que el poder del Estado
continuaría en sus manos. Y este escenario neo franquista, estaría asegurado con la
complicidad de los dos partidos políticos dominantes, que estaría alternándose
en el poder de Gobierno. El diseño de entramado electoral también fue estudiado
con astucia para conseguir que los dos partidos “estrellas “mayoritarios fuesen
siempre los beneficiados, relegando al ostracismo a los demás partidos
minoritarios cuya incidencia en el entramado de la concurrencia electoral seria
insignificante . Tarea fácil para el “nuevo Estado” pues controlaban las
fuentes de financiación y los medios de propaganda mediática.
Y este
papel del PSOE de ser comparsa del PP, ambos en la defensa de la
legitimidad de Estado neo franquista, es perceptible en sus actitudes políticas
donde en asuntos estratégicos de Estado actúan al “toque de corneta”, y solo
actuando como enfrentados en cuestiones intranscendentes políticamente, relativas a su
interés por copar el gobierno y en acusaciones mutuas de corrupción. (No para
atender mejor a la ciudadanía sino a su propia casta) Y estas cuestiones estratégicas, suelen ser la
sumisión a los Poderes del Estado y a los valores y la preservación de la Constitución,
que son, y no por casualidad, aquellos valores
a preservar legados por Franco, Sus
“atados y bien atados” legados de la “Monarquía, el Ejército y la Unidad
de España” y últimamente
su sumisión a los poderes económicos de la Troika.
Y una vez conocida la trampa de
aquella llamada “transición” nos será más
fácil comprender la deriva incierta a la
que parece que está abocado el Estado por causa del Crac causado por un creciente e importante electorado que ya empieza a estar fuera del control de este Estado, y de
sus montajes de manipulación electoral.
Y este dato no es nada banal, pues supone el comienzo del
fin del bipartidismo hegemónico y omnipotente Y un incipiente nacimiento de un criterio propio del electorado, significa que ya
ha dado un paso decisorio cuantitativo pues supone también una ruptura con
aquella actitud de sometimiento inconsciente a la alienación del poder,
pues son muchas décadas de aquel montaje
de la “transición” que tanto daño han causado en la moral política de la
ciudadanía, alienándola entre el apoliticismo el pasotismo y el seguidismo borreguil
del bipartidismo. Transformando la voluntad
ciudadana sumisa y apática, cuando no ciega, a los pulsos del poder, como una
especie de marionetas moviéndose a los impulsos de los hilos de ese poder a través de los poderes
mediáticos que transmiten la ideología alienantes del no pienses por ti mismo y “vota lo que más suena”, es
decir a los actores del Régimen.
Y la izquierda consecuente del
Estado, sobre todo la institucional, debería tomar en consideración este importante dato
socio-político que empieza a romper con
aquella carga frustrante de saberse
impotente ante la realidad de unas masas manipuladas por el poder. Pues
significa un impulso cambiante y liberador enormemente positivo, para el
avance emancipador de las masas populares. Masas que siempre debe ser el sujeto de las energías
trasformadoras de toda izquierda consecuente.
Este esquema diseñado en la “transición” donde quedo todo “atado y bien
atado”, el escenario y los actores participantes, el que hacía del partido ( lo es) conservador
el PP, y el que hacía del partido “socialista
y progresista”, el PSOE, y el que hacía de marioneta, el pueblo, moviéndose
al ritmo que les marcaba el Estado, aplaudiendo o regañando alternativamente( a
impulso de la media)a los dos protagonistas de una confrontación irreal, ha empezado ya a desmoronarse.
. En el PSOE ya han entrado en una grave crisis de identidad en su seno central
y en sus sucursales. Son ya muy perceptible las dimisiones y las declaraciones
intempestivas de sus ejecutivos exigiendo medidas y caídas de cabezas de presuntos
responsables del desastre Y es muy significativo que sus declaraciones y
preocupaciones siempre van encaminadas al incierto futuro de su partido y a sus
propias figuras personales como sujeto principal, ni una sola sugerencia o
indicios de preocupación por el que debería ser el sujeto de su presunto
“socialismo”; le ciudadanía o el pueblo
llano ante los abusos del capital, o a la evidente causa que ha provocado el
Crac, el hartazgo de sus votantes ante tanto corrupción, tanto atropello a sus
derechos despreciando a sus propios votantes
y a sus demandas de justicia o
honestidad etc.
Ha sido significativa las
declaraciones de Felipe González, el “gurú socialista” que desde su poltrona de
consejero de una multinacional (gracias a la políticas de “puertas giratoria”)
se ha mostrado “tremendamente preocupado” por el ascenso de PODEMOS, que en
realidad es la preocupación por el fin de la farsa de la “Transición” que el mismo
comenzó. Y también desenmascara al partido de su auténtica y bochornosa actitud
del oportunismo político puesto que es evidente que no les interesa el absoluto las causas reales que
han producido la fuga de sus votos; la corrupción, la justicia, las políticas neoliberales,
el aumento de la represión y el estado policial etc. Que por otra parte no sabrían actuar como auténticos
socialistas, porque nunca lo fueron y porque a fin de cuentas el PSOE fue “contratado” por los poderes facticos del
Estado para cumplir un papel de oposición ficticia al PP y cumplir con sus
compromisos de fidelidad al Estado neo franquista.
Pero lo que más temen estos dos
partidos, (sobre todo al PSOE, un partido ligado al Estado) y les produce un
gran vértigo, es la perspectiva futura que ven venir, y es el surgimiento aparentemente
espontaneo de la nada, del partido emergente PODEMOS, sin ninguna conexión ni
acuerdo con el Estado, sino más bien rupturista con sus aspectos más
impopulares y retrógrados. Pues sienten pánico al hecho de que alcance la
fuerza electoral suficiente como para no solo debilitarle sino que hasta
superarle en votos a un PSOE, que desmoronaría el esquema del bipartidismo estructural.
Porque si se da esa situación, el
esquema de la existencia de una falsa izquierda, dejaría de funcionar al
se suplantada por una izquierda
auténticamente reindivicativa y luchadora, pues es esa la imagen que en estos día está despertando la irrupción de PODEMOS.
Y que diremos del PP donde las
consecuencias externas del partido por causa del Crac no son tan perceptibles pero
es por su naturaleza soberbia y prepotente, y por la propia naturaleza cerrada
y sectarista del mismo, que les obliga aparentar normalidad e indiferencia,
ocultando al exterior sus problemas a pesar de que la perdida millonaria de
votos es similar al que ha sufrido el PSOE.
Y sus efectos y consecuencias
posiblemente serán mayores a largo plazo pues se les van acumular en cadena y por partida doble, los
que ha generado al propio partido en su incidencia electoral de pérdida de
confianza y votos entre su electorado fiel y por la incidencia en sus aparatos
de Gobierno y de Estado, donde sus
cuadros también se echaran la culpa mutuamente. No olvidemos que el Crac ha
tocado a uno de sus soportes estratégicos. El de la alienación y control de la
ciudadanía, que ya empieza a alterarse en sus esquemas estratégicos de control ciudadano,
y que a no dudar ya estarán reunidos en
urgencia para hablar de cómo enfrentar el nuevo reto.
Y tal como
los ejecutivos del PSOE tampoco los del PP serán capaces de reconocer
que la causa de su derrumbe han sido los problemas creados por las políticas
depredadoras de recortes y corrupción de sus respectivos gobiernos contra las clases más desfavorecidas. Se negaran
a querer ver y reconocer, que son ambos
y durante muchos años, los culpables de las nefastas consecuencias del malestar
ciudadano y de las enormes protestas manifestadas
por la población por esa causa. Seguirán mostrando desprecio e indiferencia hacia
estas desgracias provocadas por ello
mismos, como algo que no iba con ellos, seguros de su poder y seguros del grado
de sumisión y manipulación conseguida hacia las masas.
En Euskal Herria, para el PNV que aunque no
ha experimentado pérdida de votos, el Crac y la irrupción de nuevos partidos, también se supone le va
afectado indirectamente y con una importante incidencia en los próximos
comicios electorales, pues las variaciones que surjan en el número de escaños para completar mayorías en el
Parlamento y en las municipales, evidentemente pueden modificar sustancialmente
las composiciones de la mayoría , y sobre todo su capacidad de alcanzar el
gobierno de la CAV , que por no disponer de mayoría absoluta ,históricamente
siempre ha recurrido al comodín del PSE, cosa que puede variar sustancialmente
al irrumpir otros partidos de izquierda, no precisamente de cartón–piedra y
adictos al Régimen
Y el PNV ya está mirando con mucha preocupación y nerviosismo este comienzo de cambios en el panorama electoral,
cosa que no ocurre con EHBildu pues estas variaciones no pare que le puedan alterar su constante crecimiento,
más bien beneficiar en futuras alianzas.
El aumento del cuestionamiento de la credibilidad del bipartidismo, que
es a fin de cuentas el fondo enormemente positivo de CRAC del 25M, y el
surgimiento con inusitada energía del
partido de izquierdas PODEMOS, además del ligero crecimiento de Ezker Anitza-IU ,ha descolocado al propio
Estado de su discurso oficial del bipartidismo, también en Euskal Herirá. Aquel
discurso de la llamada “transición” ha empezado a resquebrajarse junto a su esquema de un Estado equilibrado y controlado
por los poderes facticos heredados del Franquismo. Y es el propio Estado y su
máximo representante el PP, los que tienen más que perder, cuando comience esta
desestabilización
La pieza teatral de la “Modélica
Transición” y su escenario, ya están demasiado vista y ya empieza a no gustar sobre todo las clases populares, que
también tenían su papel pasivo en la obra, muy original por cierto, pues ellos eran, sin saberlo, los principales
protagonistas como marionetas, activos-inactivos, de un montaje teatral parecido a un performance de acción política.
Y así, el pueblo llano y sano, e ingenuo diríamos, se ha empezado a cansar de interpretar exclusivamente de “votantes”
como “marionetas”, de madera, actuando a
los mandados del que esta al extremo del hilo (mediático) que les dice; ahora vota a este o bien, ahora vota al otro. Y que
felizmente empiezan a caer en la cuenta
de que los dos son unos hijos de… la
misma madre.